Vamos
ahora con una de mis películas favoritas, cuya banda sonora es todo un disfrute
de principio a fin. La obra cumbre de Zach Braff es una elegante y delicada oda
a la nostalgia y a la belleza de los buenos momentos. Belleza también
representada por una radiante Natalie Portman y, por supuesto, por unas
canciones que refuerzan y engrandecen las mejores escenas de la película. Ahí
está, por ejemplo, el popular momento en el que suenan The Shins mientras el
protagonista observa el rostro angelical de Sam (Portman). Sin embargo, dado
que en este blog nos centramos en la electrónica, la mejor opción es sin duda
el tema de Zero 7 (originalmente publicado en 2001). Sonidos trip hop que
acompañan a otra escena para el recuerdo: esa fiesta en la que las drogas ralentizan
y alteran la visión de Andrew de la realidad.
Víctor Base Lunar
Relajante y preciosa canción.
ResponderEliminarR.O.C.